martes, 17 de noviembre de 2015

Clientes: Definición, Importancia y Tipos de Clientes



A medida que la competencia es cada vez mayor y los productos ofertados en el mercado son cada vez más variados, los consumidores se vuelven cada vez más exigentes. Ellos ya no solo buscan calidad y buenos precios, sino también un buen servicio al cliente.

El servicio al cliente es el servicio o atención que una empresa o negocio brinda a sus clientes al momento de atender sus consultas, pedidos o reclamos, venderle un producto o entregarle el mismo.

Para entender mejor su concepto veamos a continuación los factores que intervienen en el servicio al cliente:

Amabilidad: amabilidad hace referencia al trato amable, cortés y servicial. Se da, por ejemplo, cuando los trabajadores saludan al cliente con una sonrisa sincera, cuando le hacen saber que están para servirlo, cuando le hacen sentir que están genuinamente interesados en satisfacerlo antes que en venderle, etc.

Atención personalizada: la atención personalizada es la atención directa o personal que toma en cuenta las necesidades, gustos y preferencias particulares del cliente. Se da, por ejemplo, cuando un mismo trabajador atiende a un cliente durante todo el proceso de venta, cuando se le brinda al cliente un producto diseñado especialmente de acuerdo a sus necesidades, gustos y preferencias particulares, etc.

Rapidez en la atención:
la rapidez en la atención es la rapidez con la que se le toman los pedidos al cliente, se le entrega su producto, o se le atienden sus consultas o reclamos. Se da, por ejemplo, cuando se cuenta con procesos simples y eficientes, cuando se cuenta con un número suficiente de personal, cuando se le capacita al personal para que brinden una rápida atención, etc.

Ambiente agradable:
un ambiente agradable es un ambiente acogedor en donde el cliente se siente a gusto. Se da, por ejemplo, cuando los trabajadores le dan al cliente un trato amable y amigable, cuando el local del negocio cuenta con una buena decoración, una iluminación adecuada, una música agradable, etc.

Comodidad:
comodidad hace referencia a la comodidad que se le brinda al cliente cuando visita el local. Se da, por ejemplo, cuando el local cuenta con espacios lo suficientemente amplios como para que el cliente se sienta a gusto, sillas o sillones cómodos, mesas amplias, estacionamiento vehicular, un lugar en donde pueda guardadas sus pertenencias, etc.

Seguridad: seguridad hace referencia a la seguridad que existe en el local y que, por tanto, se le da al cliente al momento de visitarlo. Se da, por ejemplo, cuando se cuenta con suficiente personal de seguridad, cuando se tienen claramente marcadas las zonas de seguridad, cuando se tienen claramente señalizadas las vías de escape, cuando se cuenta con botiquines médicos, etc.

Higiene: higiene hace referencia a la limpieza o aseo que hay en el local o en los trabajadores. Se da, por ejemplo, cuando los baños del local se encuentran siempre limpios, cuando no hay papeles en el piso, cuando los trabajadores están bien aseados, con el uniforme o la vestimenta impecable y las uñas recortadas, etc.

Una empresa o negocio brinda un buen servicio al cliente cuando ha trabajado en varios de estos factores; por ejemplo, cuando trata a sus clientes con amabilidad, les da un trato personalizado, los atiende con rapidez, les ofrece un ambiente agradable, y los hace sentir cómodos y seguros.

La importancia del servicio al cliente

Cuando un cliente encuentra el producto que buscaba, y además recibe un buen servicio al cliente, queda satisfecho y esa satisfacción hace regrese y vuelva a comprarnos, y que muy probablemente nos recomiende con otros consumidores.

Pero por otro lado, si un cliente, haya encontrado o no el producto que buscaba, recibe una mala atención, no solo dejará de visitarnos, sino que muy probablemente también hablará mal de nosotros y contará la experiencia negativa que tuvo a un promedio de entre 9 a 20 personas dependiendo de su grado de indignación.

Si a ello le sumamos el hecho de que la competencia cada vez es mayor y los productos ofertados en el mercado se equiparan cada vez más en calidad y en precio, es posible afirmar que hoy en día es fundamental brindar un buen servicio al cliente si queremos mantenernos competitivos en el mercado.

Debemos evitar que el cliente sea mal atendido, y así que deje de visitarnos o pueda llegar a hablar mal de nosotros, y más bien procurar que reciba un buen servicio al cliente, y así lograr su fidelización, tener buenas posibilidades de que nos recomiende con otros consumidores, y poder diferenciarnos o destacar ante los demás competidores.
       
         
El buen servicio al cliente debe estar presente en todos los aspectos del negocio en donde haya alguna interacción con el cliente, desde el saludo del personal de seguridad que está en la puerta del local, hasta la llamada contestada por la secretaria. 
Para lo cual es necesario capacitar y motivar permanentemente al personal para que brinde un buen servicio al cliente, no solo a aquellos trabajadores que tengan contacto frecuente con el cliente, sino a todos los que en algún momento puedan llegar a tenerlo, desde el encargado de la limpieza hasta el gerente general.

Asimismo, el buen servicio al cliente no solo debe darse durante el proceso de venta, sino también una vez que esta se haya concretado.
Lo primero que debemos hacer para tratar con este tipo de cliente, es tener paciencia y mantener la calma, no caer en sus provocaciones, ni discutir con él.
TIPOS DE CLIENTES Y COMO TRATARLOS
Cliente difícil
El Cliente difícil es el cliente exigente, es el cliente que siempre está quejándose de todo, que siempre encuentra un defecto hasta en el más mínimo detalle, que nunca queda satisfecho, que cree tener siempre la razón, que no le gusta que lo contradiga, y que puede hasta llegar a ponerse prepotente y agresivo.

Debemos mostrar un genuino interés por él, escuchando atentamente sus quejas y resolviéndolas lo más pronto posible, aceptando elegantemente sus críticas, dándole la razón aunque en realidad no la tenga, satisfaciendo en lo posible sus reclamos, etc.


Una forma efectiva de lidiar con este tipo de cliente, es ofreciéndole un excelente servicio al cliente, de tal manera que sobrepase lo que él esperaba de nosotros.


                         

El cliente amigable
El cliente amigable es el cliente amable, simpático, cortes, es el cliente que todo negocio siempre quiere tener, aunque en ocasiones puede llegar a ser muy hablador, haciéndonos perder tiempo.

Para tratar con este tipo de cliente, debemos ser amables y amigables con él, aunque siempre procurando mantener cierta distancia, es decir, no darle demasiada confianza.

Debemos procurar seguirlo en su conversación y en sus bromas, pero interrumpirlo cortésmente cuando la conversación se haya prolongado demasiado.



                       

El cliente tímido

El cliente tímido es el cliente introvertido, callado, en la mayoría de los casos, inseguro e indeciso.

Este tipo de cliente suele tener problemas para decidir su compra, por lo que debemos procurar darle tiempo para que elija el producto indicado, sin interrumpirlo o presionarlo. O, en todo caso, ofrecerle productos concretos y pocas alternativas, de tal manera que se facilite su decisión.

Asimismo, este tipo de cliente suele tener problemas para comunicar con claridad lo que está buscando, por lo que debemos inspirarle confianza y hacerle las preguntas indicadas que lo ayuden a comunicarse mejor.


Este tipo de cliente, por lo general, suele ser fácil de convencer, pero si le llegamos a vender un producto que no lo satisface, puede que lo llegue a comprar, pero lo más probable es que no vuelva a visitarnos más. Por lo que debemos tener cuidado siempre de venderle aquello que realmente estaba buscando, y procurar asegurarnos de que haya quedado satisfecho. Nunca aprovecharnos de él.
                    

                         
El cliente impaciente
El cliente impaciente es el cliente que siempre tiene prisa, es el cliente que quiere entrar al negocio, comprar y salir lo más pronto posible.


Este tipo de cliente exige una atención rápida, sin importar que hayan otros clientes que hayan llegando antes que él, y, por lo general, se ponte tenso cuando lo hacen esperar.


Por lo que cuando tratamos con este tipo de cliente, debemos hacerle saber que hemos comprendido que tiene prisa, y procurar atenderlo o venderle lo más pronto posible.







Bibliografia: 
http://soraida14538.blogspot.pe/
http://www.crecenegocios.com/

Clientes Difíciles : Como tratarlos y 10 consejos que te pueden ayudar



Tarde o temprano, siempre nos vamos a encontrar con clientes “difíciles”, es decir, con aquellos clientes que siempre están quejándose de todo, que siempre encuentra un defecto hasta en el más mínimo detalle, que nunca quedan satisfechos, y que pueden hasta llegar a ponerse prepotentes y agresivos.


Siempre habrá este tipo de cliente, que por más que uno trate de calmarlo, de satisfacer sus solicitudes o de compensarlo de alguna manera, nunca quedará satisfecho, y que muy probablemente amenazará con no volver más a contactar nuestro negocio, o con nunca más adquirir nuestros productos.

Los clientes difíciles pueden generar situaciones muy frustrantes y molestas que debes aprender a manejar. La buena noticia es que, con un poco de habilidad, puedes dar la vuelta a la situación y convertir a ese cliente insatisfecho en un fiel comprador.



Aquí tienes algunos consejos para tratar con clientes difíciles por Internet.


Determina cuál es la razón de su queja
Lo primero que debes hacer es saber por qué tu cliente no está contento y localizar la causa que está dificultando la transacción. Hay muchos motivos por los que los clientes pueden quejarse.

¿Esperaban más de tu producto? ¿Quieren que les regales algún extra? ¿Simplemente se quejan por costumbre? Conocer el motivo de su insatisfacción te ayudará a encontrar el mejor enfoque para solucionar el problema.


                             

Ponte en su lugar y pide disculpas


Independientemente de la causa que haya motivado la queja, pedir disculpas siempre abre un camino para la reconciliación. Si te muestras desconfiado o a la defensiva, el cliente lo percibirá y su actitud será todavía más desafiante. Incluso si estás seguro de que has actuado correctamente, una disculpa cuidadosamente redactada puede marcar la diferencia. A veces los clientes sólo quieren saber que quien está al otro lado se preocupa por ellos.                           

                       

Ofrece una solución a los clientes difíciles

En la mayoría de los casos hay una solución para todo problema. Haz un esfuerzo para ofrecerle una solución o varias que le dejen satisfecho. Si no das ninguna alternativa a un cliente difícil o lo que le ofreces no le satisface, la situación puede empeorar mucho.


Dirígete al cliente con amabilidad y firmeza, hazle saber que entiendes su postura y proponle una solución. Normalmente, los clientes responden muy bien en estos casos.

Pautas para atender al cliente en situaciones críticas, Alejandro Vesga en EPSON Blog

Si no cede, déjale marchar


Algunos clientes están permanentemente insatisfechos, no sólo con tus productos o servicios, sino con la vida en general. Si has puesto todo de tu parte y el cliente no acepta una solución, lo mejor es que le dejes marchar.

Repítele con amabilidad los modos que le ofreces para solucionar el problema y haz que la experiencia resulte lo más positiva posible para él. Termina diciendo algo como "siento mucho que no hayamos podido llegar a un acuerdo". Algunos clientes reaccionan muy bien ante estas frases.

En cualquier caso, si no hay manera de arreglar la situación, deja que el cliente se vaya. Forma parte de cualquier negocio tener un pequeño porcentaje de clientes que no volverán a trabajar contigo.

En ocasiones, los clientes más difíciles se pueden convertir en tus mejores aliados y en los clientes más fieles. Se encargarán de contar su buena experiencia a los demás y harán que tu negocio crezca. También te ayudarán a mejorar, ya que deberás estructurar de nuevo tus políticas y procedimientos para que experiencias como éstas no vuelvan a suceder y tus capacidades de negociación y de resolución de conflictos se verán fortalecidas.

Si te toca tratar con un cliente difícil por Internet, recuerda que puede tratarse de una excelente oportunidad para conseguir un cliente para siempre.








10 Consejos para ayudarte a hacer frente a los clientes difíciles

1. Mantén la calma

Cuando una persona no está en calma en sus interacciones con los demás, puede hacer que sea casi imposible atravesar satisfactoriamente una situación con un cliente enojado. Cuando la ira se junta con la ira, el desdeño o el sarcasmo, conseguimos un mal resultado.

Cualquiera de los comportamientos mencionados anteriormente se considera una falta de profesionalismo. Así que incluso de cara a los clientes difíciles lo más importante es mantener la calma. Una cosa que debemos recordar es que tener la cabeza tranquila nos hace más aptas/os para encontrar soluciones y alternativas a los reclamos de los clientes.

2. Aprende a escuchar

Resulta significativo que los seres humanos tengamos dos oídos y sólo una boca, ¿no crees?. La gente debería centrarse más en desarrollar la capacidad de escuchar que en la de hablar.

Tener buenas habilidades de escucha hace que los clientes se sienten más comprendidos. Una gran manera de reducir los conflictos con el cliente es permitir que este exprese sus preocupaciones.

Esto puede muy bien ser todo lo que se necesita para ayudar a mantener la calma a través de la interacción. Permitir a los clientes “ventilar” su enojo es uno de los mecanismos utilizados para calmar a un cliente furioso.

Los clientes enojados son a menudo como géiseres, primero levantan presión, luego estallan, y después se quedan tranquilos hasta el próximo incidente. Ganarás mucho más margen de maniobra si mantienes tus oídos atentos que la boca repleta de disculpas.

3. Aprende a disculparte


Una disculpa puede recorrer un largo camino. Por eso es importante que cuando pasa algo no deseado con un cliente estés dispuesta a pedir disculpas. Muchas veces, los clientes buscan recibir tus disculpas, incluso cuando no corresponde. Sin embargo, disculparse es siempre importante cuando se trata de apaciguar a un cliente molesto.

Es importante recordar que a menudo la disculpa se relaciona más con la sensación que tiene el cliente que con realmente haber sido maltratado. Así que siempre hay que estar abiertas/os y dispuestas/os a ofrecer una disculpa de algún tipo a los clientes enojados y heridos.

4. Muestra empatía

Muestra solidaridad con los clientes ya que nunca sabes por lo que están pasando en ese momento. Algunas personas sufren por una experiencia en su vida, una enfermedad o por la pérdida de un ser querido. Tal vez un cliente acaba de recibir una mala noticia sobre su salud, o la de un familiar o simplemente se encuentra dolorido/a.

Si bien a ti te puede estar pasando lo mismo, una de las cosas más importantes a tener en cuenta es que cobras por los servicios que ofreces. Y, más importante, buscas clientes para los servicios que brindas. En última instancia, sin clientes no hay negocio y sin negocio no hay necesidad de tus servicios.

5. No tomes las cosas de forma personal


Al tratar de interiorizarte sobre lo que causa la insatisfacción de un cliente, a menudo puedes llegar a sentir como si estuvieras siendo atacada personalmente. Es de vital importancia que recuerdes que eres la cara y la voz de la empresa y los clientes te ven como si tomaras todas las decisiones que resuelvan sus preocupaciones. Siempre ten en cuenta que simplemente no sabes por lo que el cliente está pasando, así que utiliza la compasión y simpatía al tratar con clientes enojados.

6. Proporciona alternativas

En te encuentres dedicada a la búsqueda de alternativas, mantén siempre en mente la satisfacción del cliente. Si bien los clientes no estarán satisfechos con todas las alternativas que les presentes, siempre es importante proporcionar al menos una.

A veces parece casi imposible ofrecer una alternativa pues no hay ninguna a la vista. En tales situaciones, ofrece una alternativa al afirmar “Estaríamos muy contentos de ayudarlo cuando usted …” llena los espacios en blanco. Esto no es una ciencia exacta, pero siempre hay opciones para ofrecer a los clientes.

Trabaja duro para resolver sus inquietudes, ya que muchas veces simplemente con hacer el esfuerzo es más que suficiente para ganar la aceptación y aprecio de los clientes. En resumen, preocúpate y ocúpate de los problemas con tu cliente.

7. Valora su tiempo
Parte del respecto mutuo consiste en valorar el tiempo del cliente. Si tu tiempo te parece tan valioso ¿Por que no lo sería el del cliente?. No lo dejes esperando en el teléfono o le des vuelta para ofrecerle una solución.


8. Abre nuevas vías de comunicación

Además del teléfono no puede ser que la única forma que tenga el cliente de presentar una queja sea ir personalmente a la empresa y ponerse a llenar formularios.

Hoy existe el correo electrónico, la mensajería instantánea y sí, ya has adivinado: los medios sociales, entre ellos Twitter es una excelente herramienta para gestionar el servicio de atención al cliente (pero no abras canales que luego no atiendas).

9. Evalúa al cliente

Posiblemente este consejo debería situarse más arriba en la lista, pero esta lista no indica un orden de ejecución.

Además del calmar al cliente manteniendo la compostura, lo que debemos evaluar es si ese cliente es un buen cliente para nuestro negocio. Pues si se trata de un cliente que nada le viene bien, que siempre se queja (sin motivo), que te consume recursos que podrías dedicar a otros clientes, lo más sensato es dejarlo ir en buenas relaciones. Aquí debes repasar muy bien la regla de Pareto.

10. Haz el seguimiento

Una vez que resolviste el problema, espera unos días y contacta con el cliente. ¿Se resolvió el problema? ¿Está satisfecho con la solución? ¿Qué más podrías hacer por el/ella?


Conclusiones

Siempre es conveniente dar al cliente una salida honorable a una situación tensa. La principal virtud que puedes tener (tú o la persona encargada de tratar con tus clientes) es la escucha atenta, aun cuando el cliente no tenga razón…

Desde el punto de vista del cliente no hay nada peor que le contesten antes de que termine de expresar su problema, a menudo indicando que todo lo que te interesa es “patear” el problema fuera de tu campo es vez de tratar de entender y resolver su situación.

Tu respuesta ante el enojo (justificado o no) de un cliente hace la diferencia entre un cliente satisfecho y uno que se larga buscar otro proveedor hablando pestes de ti por el camino.



Bibliografia: 
www.todosobredinero.com
www.mujeresdeempresa.com
www.crecenegocios.com/

martes, 10 de noviembre de 2015

51 maneras de aumentar las ventas de tu negocio

Uno de los principales cuestionamientos que persigue a un emprendedor es el cómo aumentar las ventas de su negocio. Tienen un buen producto, un bonito local y muchas ganas de vender, pero los clientes no llegan...

Existen infinidad de estrategias para dinamizar las ventas, algunas requieren de grandes inversiones de dinero y otras requieren de un alto nivel de creatividad. Saber cuál es la mejor forma de promocionar tu negocio depende de tu presupuesto, del modelo de negocios, de la industria en que compites y de muchos otros elementos.


En este articulo te quiero compartir un listado con cincuenta y un ideas practicas para incrementar las ventas de un negocio. Espero que te resulten interesantes y te puedan servir en algún futuro.



Cómo incrementar las ventas de tu negocio
propuesta-marketing-online

1. Dale una identidad a tu negocio. Tómate tu tiempo para diseñar una imagen corporativa única e impactante. Elabora un logotipo, un slogan, una misión, una visión, un nombre comercial y cualquier otro elemento que te distinga de la competencia.

2. Establece metas de ventas diarias, semanales y mensuales (si aún no las tienes). Cada vez que cumplas tus metas proponte metas más y más grandes.

3. Si no llevas un registro de ventas es hora de comenzar a hacerlo. Puedes usar excel o algún software de gestión empresarial de los que te hemos compartido aquí. Si no llevas un control sobre tus ventas será difícil saber sí estas creciendo o no y cuáles estrategias funcionan y cuales no.

4. Conoce a tus clientes. Preocúpate por saber quiénes son, qué los motivo a ir a tu negocio, dónde viven, qué les gusta, etc. Cualquier dato puedes ser muy valioso para tus estrategias.

5. Elabora una base de datos de clientes. Consigue sus correos, sus teléfonos, dirección y cualquier información adicional que te pueda ser útil para mantener contacto con ellos y desarrollar estrategias de fidelización.

6. Las ventas de un negocio se pueden incrementar drásticamente con pequeños cambios en el empaque de los productos, decoración del local comercial, organización del mobiliario en el local, etc. En otras palabras, la idea es hacer Merchandising para que los productos sean más atractivos a la vista del cliente.

7. Dales razones a tus clientes para que quieran volver y para que te recomienden con sus amigos. No te olvides de lo básico: ofrecer un producto de calidad acompañado de un buen servicio al cliente.

8. Cambiar la combinación de colores usados en el producto, el empaque, la publicidad, la marca, en el local comercial, etc. Recuerda que el color puede llegar a influir de 60% a 80% en la decisión de compra de un producto.

9. Invierte en publicidad. Esperar a que el negocio crezca por si solo es un error fatal. Debes destinar un presupuesto mensual de los ingresos a promocionar el negocio por diferentes medios. Si tu presupuesto es limitado, no te preocupes, significa que debes hacer un esfuerzo mayor, pero con mucha creatividad puedes hacer campañas publicitarias muy económicas y de alto impacto.

10. Crea tu propio sitio web y publica en él información de interés para tu mercado. También puedes ofrecer descuentos y ofertas exclusivas para tus lectores.

11. Las redes sociales están llenas de clientes esperando por ti, y lo mejor es que si les gusta tu producto van a estar dispuestos a recomendarte con sus amigos. Empieza por crear una fan page en facebook, un perfil en twitter y un canal de videos en youtube. Hay muchas otras redes sociales que pueden ser muy útiles según la industria o tipo de empresa. No debes estar en todas las redes sociales, solo en aquellas que consideres convenientes.

12. Sorprende a tus clientes ofreciéndoles experiencias positivas en la compra y consumo de tus productos. Recuerda que el marketing experiencial es clave para destacar de la competencia y ganar la preferencia en el mercado.

13. Facilita la vida de los clientes a la hora de realizar su compra. Si tienes un negocio de comidas rápidas, una buena idea es ofrecer "combos" (al estilo McDonalds) para que el cliente pida varios productos en lugar de solo uno.

14. Capacita a tus vendedores para que aprendan técnicas y estrategias de ventas que les permitan ser más efectivos en cada oportunidad. Aquí puedes encontrar gran cantidad de material para aprender sobre ventas.

15. Crea una cultura de competencia sana entre tus vendedores. Ofrece incentivos al vendedor del mes y otros reconocimientos que los motiven a vender cada día más.

16. Las tarjetas de negocio continúan siendo una herramienta interesante, no está de más repartirlas entre tus clientes, especialmente si la tarjeta va acompañada de un bonito mensaje, de una imagen llamativa o de algún recurso útil como un calendario. La idea es que sea especial para el cliente y no solo una tarjeta más.

17. Identifica la ventaja competitiva de tu empresa y explotala. Descubre que tienes de especial para ofrecer al consumidor y por qué deberían preferirte a ti y no a la competencia.

18. ¿Con quién estas compitiendo? Identifica y analiza la competencia. Descubre cuáles son sus puntos fuertes y sus puntos débiles. Si lo consideras conveniente puedes hacer alianzas con ellos que generen beneficios para ambos.

19. Diseña una política de garantía y de calidad que dé confianza a los clientes potenciales, especialmente cuando hay productos similares de menor precio en el mercado.

20. Ofrece muestras gratis de tus productos o servicios. No es una táctica que se pueda aplicar a todo tipo de negocios, pero siempre que sea posible es una muy buena estrategia a implementar.

21. Premia a tus clientes más fieles. Demuéstrales que son importantes para ti. Llámalos en su cumpleaños y dales un regalo, ofreceles descuentos y ofertas especiales, hazles sentir que son especiales.

22. Presta atención a las quejas, reclamos y sugerencias de cada uno de tus clientes y brindales una respuesta rápida a su solicitud. En estos tiempos, un cliente insatisfecho disfruta compartiendo sus experiencias negativas con todos sus amigos y contactos en redes sociales. No te arriesgues.

23. Ofrece servicios post-venta y servicios adicionales gratuitos. Servicio técnico, asesoría, fletes gratis, etc.

24. Innova constantemente. Demuestra que tu negocio quiere mejorar cada día. Lanza nuevos productos, cambia los diseños periódicamente, renueva tu local, etc.

25. Expande tu negocio. Identifica nuevos mercados, nuevos canales de venta, considera llevar tus productos a mercados internacionales, agranda tus locales, abre nuevas sucursales, vende franquicias o busca cualquier otra estrategia que te permita ampliar los alcances del negocio.

26. Aprovecha las temporadas y fechas especiales. La temporada escolar, san valentín, día de la madres, día del padre, día de los niños, halloween y muchas otras fechas se caracterizan por un gran movimiento comercial donde los consumidores no miden sus gastos.

27. Ofrece diversas formas de pago, muchas personas no les gusta usar el dinero en efectivo para sus compras. Recibe tarjetas, implementa medios de pago electrónico, vende a crédito, etc. La idea es facilitarle la vida a las personas a la hora de pagar.

28. Las ventas a domicilio son una opción interesante. Analiza si es posible implementarlas en tu modelo de negocios.

29. Sé sincero con el cliente y demuéstrale que puede confiar en ti. Actualmente el consumidor está más informado que nunca y tratar de engañarlo solo te hará quedar mal y te hará perder ventas importantes.

30. Hazte accesible a los clientes a través de todos los medios posibles (email, web, teléfono, etc.). Ellos querrán contactarte para solicitar información, asesoría, acercarte dudas, etc.

31. Sigue las tendencias de mercado y ajusta tus estrategias de negocio conforme a ellas. Un producto que se vende muy bien hoy podría dejar de ser demandado el día de mañana.

32. Crea alianzas con otras empresas. No importa que no pertenezcan a la misma industria, las alianzas estratégicas representan grandes oportunidades para las empresas.

33. Pon el precio adecuado a tus productos y servicios. Recuerda que la formula para el éxito en los negocios es lograr que el cliente reciba más valor del que está pagando. Realiza análisis de elasticidad precio-demanda para comprobar cuál es el precio más conveniente.

34. Organiza eventos patrocinados. Un campeonato de fútbol, eventos sociales, conferencias, seminarios o cualquier evento que atraiga personas que puedan estar interesadas en adquirir tus productos. Es una muy buen manera de fidelizar y de atraer nuevos clientes.

35. La ubicación de tu negocio es clave. Si las ventas están bajas puede deberse a una mala ubicación y bastaría con encontrar una zona más adecuada para dinamizar las ventas.

36. Haz que tu local comercial sea cómodo y agradable. Tu producto puede ser muy bueno, pero si el cliente se siente incomodo va a tener pocas ganas de volver.

37. Utiliza regalos promocionales que sean útiles. Muchas empresas regalan memorias usb personalizadas, calendarios, bolígrafos, llaveros, destapadores, etc.

38. Crea una app de tu empresa. Puede ser un juego, una aplicación útil o algo que complemente tu negocio. Lo importante es que el consumidor te lleve en su dispositivo móvil a todas partes.

39. Utiliza técnicas de neuromarketing que impacten los 5 sentidos del consumidor. El marketing visual no lo es todo.

40. Crea una conexión emocional con tus clientes. Vendeles actitud, felicidad, confianza, experiencias, valores, etc.

41. Diseña un plan de referidos donde premies a aquellos que recomienden tu negocio.

42. Descubre qué busca tu cliente y dáselo. Algunos buscan eficiencia, otros quieren una buena atención y hay quienes prefieren experiencias completas.

43. Cada cliente es único y debe ser tratado como tal. Busca la manera de ofrecer productos, servicios y experiencias personalizadas a cada uno de ellos.

44. Reparte volantes, haz perifoneo, contrata publicidad en la radio o en el periódico local y realiza cualquier otro tipo de propaganda que te permita posicionarte en el mercado local.

45. Usa carteles con "palabras mágicas" que impulsen el deseo de compra. Algunas de estas palabras son: oferta por tiempo limitado, rebajado, 2x1, a mitad de precio, tanto por ciento de descuento, gratis, entrega inmediata, garantía, etc.

46. Unas ventas bajas pueden ser consecuencia de un mal enfoque. Recuerda analizar y mejorar tu modelo de negocios de manera periódica, especialmente si estas en una industria muy dinámica (por ejemplo si tienes un negocio online).

47. Usa precios psicológicos. Los precios terminados en 5,7 o 9 captan más fácilmente la atención del consumidor, dificultan hacer comparaciones y hacen creer que son más económicos que los precios redondos.

48. Evalúa constantemente tus estrategias de marketing para comprobar cuáles funcionan y cuáles no. Debes enfocar tus energías y recursos en las estrategias que funcionen y hacer a un lado aquellas que no tienen mayor impacto.

49. Contrata vendedores apasionados que disfruten de su trabajo y transmitan esa pasión a los clientes. Esta estrategia es uno de los pilares del éxito de compañías como Apple.

50. Optimiza los procesos logística. La eficiencia es clave.

51. Realiza una encuesta de satisfacción y busca la manera de que los clientes la respondan sinceramente (podrías ofrecer un incentivo), de esta manera vas a saber qué quiere tu mercado, qué estas haciendo bien y qué debes mejorar.

Para finalizar les dejo un video gráfico de 20 estrategias para incrementar las ventas de tu negocio.

Bibliografia: http://www.negociosyemprendimiento.org/